La icónica película de 1993 se exhibirá entre el 14 y el 20 de agosto, excepto el 16 y 18 de agosto. Las entradas cuestan $2.000 y $1.000.

Gustavo Graef Marino (director) vivía en Alemania, y por esos días, venía de visita al país. Y en uno de sus pasos por Chile coincidió con un hecho policial que llamó su atención: en el centro de Santiago una banda tomaba rehenes y, al verse acorralados por la policía, pusieron particulares exigencias. El delito no solo acaparó la mirada del realizador, sino también la de las emisoras de radio y los canales de televisión, que transmitían en vivo. Así, comenzaba a gestarse una de las películas que se transformó en un ícono del período y que ahora será reestrenada en la Cineteca Nacional de Chile: Johnny 100 Pesos.

«Recién estaba recuperada la democracia en Chile, con apenas seis meses de gobierno democrático y pensé: si esto hubiera pasado seis meses, un año o dos años atrás, habría sido completamente diferente. Posiblemente hubieran echado a la policía, hubieran baleado… pero eso ya no era posible en este nuevo Chile, que estaba aprendiendo a vivir y a experimentar lo que era la democracia -explica el director-. Me interesó que uno pudiera traer un hecho criminal para hacer una radiografía del Chile post dictadura».

Desde entonces hasta llevar a Juan García García, o Johnny, a la pantalla grande, el equipo realizó docenas de entrevistas en cárceles de menores, hasta que -haciendo una síntesis de ellas-, dieron vida al protagonista, que además tenía la edad de la dictadura: para concebirlo, pensaban en que había nacido en septiembre de 1973 y que se disparaba a principios de 1990. Así surgió el guión de la película, escrito por Gustavo Graef Marino y Gerardo Cáceres.

Johnny 100 Pesos será exhibida entre el 14 y el 20 de agosto (excepto el 16 y 18), a las 20:30 horas, en una versión remasterizada tanto en la imagen como en el sonido. Los negativos originales se encontraban en Estados Unidos y fueron repatriados por la Cineteca Nacional donde hoy son conservados. La cinta llegó con un rollo menos y fue recuperado a través de procesos de laboratorio en Argentina y luego se obtuvo una copia digital nueva, remasterizada (cuya restauración sonora fue realizada por Filmosonido), en el marco de la tarea de preservación del Patrimonio audiovisual que realiza la Cineteca.