Por Ricardo Olivero.
La historia del hardcore punk tiene nombres que no solo marcaron un sonido, sino que moldearon una actitud frente a la vida; músicos que crearon un movimiento y levantaron banderas que perduran hasta el día de hoy. 7 Seconds, es uno de esos grupos icónicos del hardcore estadounidense que, con más de 40 años de trayectoria, regresa este 2025 a Sudamérica con una esperada presentación en Santiago de Chile el próximo viernes 8 de agosto en la Sala Metrónomo, que será testigo de un concierto que no es solo música: es memoria, comunidad y resistencia.
Formados en 1980, en Reno, por dos grupos de hermanos de clase trabajadora, los Marvelli y los Borghino que, posteriormente, adquirieron seudónimos artísticos, Kevin Seconds, Steve Youth, Tom Munist y Dim Menace, se posicionaron rápidamente como una banda esencial en la configuración del hardcore punk. Fueron los primeros en autodenominarse «hardcore», al mismo tiempo que sus letras escapaban de la oscuridad nihilista del punk de la época, para promover una actitud mental positiva (PMA), comunidad y conciencia social. Frente al caos, optaron por el compromiso; frente al odio, por la unidad, teniendo estos estandartes como bandera de lucha con la música como caja de resonancia de sus ideas.
Durante más de cuatro décadas, 7 Seconds ha hecho de su música una plataforma para hablar contra el racismo, el sexismo y la homofobia. Su influencia fue clave en el surgimiento del movimiento Straight Edge y del subgénero Youth Crew, cuya impronta sigue viva en muchas escenas del punk global, en el cual la banda ha contribuido con más 16 álbumes de estudio, entre otros recopilatorios y EPs, constituyéndose como un pilar fundamental del punk y que, a su vez, no ha tenido miedo a explorar otros sonidos como el new wave, el post punk y el pop, haciéndolos no solo una banda consecuente, sino que una que no tuvo miedo de desafiar sus propias etiquetas a la hora de crear música.
La visita a Chile es más que un simple regreso: es un acto de reencuentro. El 25 de septiembre del 2020, Kevin Seconds en su cuenta de Instagram, conmemoraba los 5 años que se cumplían de su show en el Arena Recoleta de Santiago, refiriéndose a él como “uno de los absolutamente mejores shows en los que ha tenido que tocar” describiendo la atmósfera como “perfecta” y con una de las demostraciones más grandes de energía y amor que ha visto en su vida, concluyendo con un “y créanme, he visto muchas”, lo que hace de este show no solo un simple concierto, sino que levanta la expectativa de algo que se pensó no volvería a ocurrir jamás y que ahora estamos solo a unos días de vivir (esperemos) con la misma intensidad que aquella noche del 2015.
No es casual que la banda convoque a una audiencia multigeneracional. Su música, si bien en el underground, ha trascendido épocas y no tenemos dudas que volverá a ser una catarsis colectiva, una celebración de la resistencia y un traspaso (contra) cultural que marcará a los fanáticos locales del hardcore y sus derivados.
Pero no todo ha sido color de rosa para la trayectoria de la banda. El 2018, por medio de un comunicado público vía Facebook, 7 Seconds anunciaba su separación definitiva a solo dos años de cumplir las 4 décadas de trayectoria, argumentando no poder seguir con el estilo de vida de giras por las condiciones de salud de su baterista Troy Mowat, que acompañó a la banda en buena parte de su trayectoria (desde 1983) y que, en ese momento, se fracturó una vértebra y estuvo luchando contra el daño de los nervios en su cuello y muñecas, situación que lo alejó de tocar batería, sumado a la condición de Steve Youth que en ese momento luchaba contra la ceguera en su ojo izquierdo, además de depresión, ansiedad y problemas de adicciones ocasionados por la frustración de su situación médica.
Es más, la visita de Youth está en veremos para esta gira, dando que hace un mes se cayó dañándose su hombro, siendo reemplazado por Bobby Jordan en la patita norteamericana. Hasta el termino de esta nota, no hay claridad aún de quién tocará el bajo con la banda, sin embargo, el resto de la alineación es de lujo: el mítico Kevin Seconds (voz) acompañado por Bobby Adams, en guitarra, que está presente en la banda desde 1986 y el legendario Sammy Siegler (Youth of Today, Judge, CIV) en batería, otra figura icónica del hardcore punk que ha marcado el beat de generaciones del género. Esta combinación garantiza un show con potencia histórica y precisión demoledora. El repertorio promete clásicos como “Walk Together”, “Rock Together”, “We’re Gonna Fight”, “Young ‘Til I Die” y su inolvidable versión de “99 Red Balloons”, repasando buena parte de su extensa discografía que tiene al álbum The Crew como uno de los más fundamentales en la historia de la banda y del hardcore en general.
El evento se realizará el viernes 08 de agosto a las 18:00 horas, en la Sala Metrónomo (Ernesto Pinto Lagarrigue 179, Recoleta). Aún puedes conseguir entradas en Preventa 2 a través de Passline. Este no es un show más. Es la vuelta de una banda que ayudó a formar la columna vertebral del hardcore mundial. Es un momento para reunirse, para reencontrarse con los ideales que alguna vez nos hicieron tomar una guitarra, armar una tocata o simplemente creer que la música podía cambiar algo. Un deber para los fanáticos del hardcore punk.