Alegría y música para el sur: Jornada solidaria en Club Chocolate
8 de febrero 2017.

Por Gabriela León.
Fotografías por Alicia Martínez.

Estas primeras semanas que llevábamos del 2017, se han caracterizado, lamentablemente, por la presencia de diferentes incendios forestales en la zona centro-sur de nuestro país. Situación que ha sensibilizado a gran parte de la escena musical nacional y que a través de diferentes eventos han logrado reunir recursos que han ido en ayuda de las familias afectadas por esta situación. Esto con el fin de poder aportar un grano de arena en la ardua tarea que se viene por delante para los más afectados.

El día de ayer, miércoles 8 de febrero, se realizó en el Club Chocolate el evento «Alegría y Música para el Sur», instancia que reunió a la música a De Kiruza, Los Tetas y Pedropiedra, junto al humor de Natalia Valdebenito, en una entretenida velada que tuvimos la oportunidad de presenciar.

Si bien el show se encontraba programado con la apertura de puertas a las 21:00 hrs, el inicio que estaba a cargo de Natalia Valdebenito fue a las 23:00 hrs, lo que provocó que algunos asistentes estuvieran más ansiosos, y que, además, Los Tetas, quiénes cerraban la noche, salieran al escenario alrededor de las dos de la mañana.

Natalia Valdebenito, le hizo honor a lo que fue su actuación el año pasado en el Festival de Viña del Mar con una rutina de primer nivel, cargada al humor de parejas y las diferentes situaciones que se viven en la cotidianidad de una relación amorosa logró que todos los que estábamos allá nos riéramos bien fuerte. Fue una rutina sin censura y que deja abierta la pregunta de quién y cómo maneja la censura en la televisión, lo cual fue una clara diferencia a lo visto el año pasado en Viña.

Natalia dejó el escenario abierto para lo que sería una gran noche de música. En un mismo escenario se verían artistas iconos de la música Funk en nuestro país, como también, uno que se abre puertas no solo en Chile, sino que también en tierras mexicanas, el señor Pedro Subercaseaux o mejor conocido como Pedropiedra.

Ayer Subercaseaux, quien se presentó con una tenida mucho más relajada compuesta de una polera con una camisa abierta y con su jockey para atrás, lo cual reflejaba que se dedicó a pasarlo bien. Con sus canciones «Todos los Días», «Pelusita» y su último single «Rayito/olita» levantó de sus puestos a más de alguno que quería disfrutar de estos temas nuevos del disco «Ocho», lanzado durante el año pasado. La sorpresa de la noche estuvo dada por la interpretación en modalidad trío que trajo nuevamente a Pedro a la batería durante la canción «Las niñas quieren», para finalizar con la que sería, en mi humilde opinión (y creo haber visto varias presentaciones de Pedropiedra), una de las mejores versiones que he tenido la oportunidad de presenciar de la «La Balada de J. González». Con ritmos mucho más andinos y con el toque y la fuerza de Pedro en la batería, fue sin duda la nota alta de su presentación el día de ayer.

Para el final, De Kiruza y Los Tetas fueron los protagonistas de la parte más Funky de la noche. De Kiruza nace a finales de la década del 80 en una época donde el acontecer político-social pedía algún gesto de liberación, en donde introducen en la escena musical chilena una banda fusión de Sonidos Afroamericanos, Funk, Hip Hop, Soul y que finalmente serían parte de la influencia musical de grupos como Tiro de Gracia, La Pozze Latina y Los Tetas. Música funk, que a mi parecer alegra los corazones. Creo no ser la única persona que con canciones como “Liviano como el viento”, “La bolsita de Neopren” o la mítica “Bakan”, se siente llena. No solo por su ritmo, ni por la encantadora voz ni los bailes de Pedro Foncea (que sigue siendo, a mi parecer, el mejor exponente Soul de nuestro país), sino que, además, por sus letras, que hablan de la cotidianeidad de la ciudad de Santiago, de su gente y de su cultura. Los Tetas anoche no se quedaron atrás, los sonidos en la guitarra de C-Funk o en el bajo de Rulo han calado en todas las generaciones y lejos lo más grato de sus conciertos es la transversalidad que transmiten. A pesar de los años que han pasado y todas las peleas, atados, separaciones, vueltas y amistades, siguen demostrando que son una de las mejoras bandas Funk del país. Al parecer, la música siempre es más importante.

>>> REVISA NUESTRA RESEÑA FOTOGRÁFICA PINCHANDO EN ESTE TEXTO <<<