Por Jorge Fernández.

James Blunt retorna a nuestro país y lo hace por partida doble: mientras que el 1 de marzo lo hará en el Gran Arena Monticello, para el día siguiente está planificado un segundo concierto en el Teatro Caupolicán. El británico vuelve con The Afterlove (2017), su más reciente disco y, por supuesto, con todos aquellos temas que lo han encumbrado en lo más alto de los rankings planetarios.

A diferencia de otros artistas de su envergadura, James Blunt (1974) inició su carrera musical a edad más bien tardía, pues su primer disco, Back to the Bediam, recién vino a aparecer en el año 2004. Esto porque su vida y su familia han estado marcadas por una relación estrecha con la arista militar de su país, lo que hizo de Blunt, un acérrimo filántropo, se codeara con organizaciones que han ido en ayuda, principalmente, de los damnificados en situaciones bélicas.

Sociólogo, piloto de aviones, fanático del esquí y la equitación, multiintrumentista y gozador de la vida. Así es como en pocas palabras se puede caracterizar a un artista como él, a quien el éxito le llegó de sopetón, pues si bien en 2004 no era conocido por nadie, al año siguiente se convirtió en una figura mundial.

Back to the Bediam es un disco que se abrió campo primero en terreno nacional y que, con posterioridad, explotó en el mundo entero. Todo comenzó por medio de los sencillos “High” y “Wisemen”. Sin embargo, la consagración vendría a partir de “You´re Beautiful” con la cual ingresó al mercado estadounidense y, de ahí en más, a todos los rincones del orbe. “Goodbye My Lover” fue el cuarto sencillo que apareció cuando ya la fama había llegado, a lo que se sumó la reposición de sus primeros singles donde, incluso, rehízo los videoclips con pequeñas modificaciones definitivas de por medio.

All the Lost Souls (2007) es su segundo álbum y la dosis de éxitos se repitió. Su primer sencillo “1973” también se enmarca en la categoría de sus temas más reconocidos y a este se adicionan canciones como “Same Mistake” y “Carry You Home”.

La llegada de la segunda década del nuevo siglo trajo consigo nuevos frutos para el trabajo productivo de este talentoso artista británico que tiene especial manejo en instrumentos como violín y piano y, obviamente, su fiel compañera de mil batallas: la guitarra. Y esto último casi literal, pues se cuenta que cuando estaba en terreno, colgaba el instrumento del tanque que lo transportaba y, además, compartía sus canciones en diversas instancias en donde se necesitaba un poco de claridad y paz.

Some Kind of Trouble (2010) fue su tercer disco, en el cual, se aprecia una actitud mucho más positiva que en sus trabajos anteriores. De la placa destacan las canciones “Stay the Night”, “I´ll Be Your Man” y “If Time is All I Have”.

Su cuarto disco lleva por nombre Moon Landing (2013) y sencillos como “Bonfire Heart” y “Heart to Heart” recibieron una buena acogida por parte del público. Y era que no, si a estas alturas, James Blunt ya brillaba con luz propia y no necesariamente por los denominados primeros One Hit Wonders.

El retorno a nuestro país viene de la mano de su quinto y último disco publicado a la fecha, The Afterlove. De este se desprenden temas que ya suenan con gran efervescencia y que, de seguro tendremos la oportunidad de escuchar en vivo y en directo. El álbum contó con la colaboración de grandes músicos tales como Ed Sheeran, Ryan Tedder y Robin Schulz. “Don´t Give me Those Eyes”, “Bartender” y “Love Me Better” son solo algunas de las canciones incluidas en él.

Una reunión imperdible con este artista de corta pero gran carrera musical que promete conquistar, una vez más, el corazón de los miles de fanáticos que tiene en terreno nacional.

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