Megadeth en Santiago Gets Louder 2017: Sinfonía para las masas
Movistar Arena, 29 de octubre 2017.
Por Rodrigo Guzmán.
Fotografías por Victor Santibañez.
Si bien la presentación de King Diamond en El Domo de Santiago Gets Louder 2017, dejó a más de alguno listo para emprender una satisfactoria vuelta al hogar, pero aún quedaba un número más. Tal número era un viejo conocido de la casa, pero no por ello menos ansiado. De dicho modo, Megadeth, la agrupación comandada por el eterno Dave Mustaine, aterrizó en Santiago, una vez más, para engendrar un torbellino de trash metal en la capital.
Se pueden decir muchas cosas sobre Megadeth y su fértil relación con este terruño. Que han venido con anterioridad una cantidad ridícula de veces, que a Mustaine no le queda voz, que aquí o allá. Si bien todo esto es parcialmente cierto, cuando el californiano se cuelga su guitarra al hombro cada crítica es barrida a fuerza de conocidos riffs, cuya interpretación en vivo es aplastante.
De este modo, a las 21:50 horas, se dio inicio a la presentación de la banda. Abrieron fuego con “Hangar 18”, cuyo riff inicial hizo que los asistentes dieran rienda suelta a la ansiedad y todo fueran saltos y coros. Luego de ello, vino “Wake Up Dead”, sencillo clásico del año 1986, extraído de Peace Sell…But Whos Buying?. Tras esto, siguió la interpretación de “In My Darkest Hour”, apoyado por los cantos del público, quienes coreaban afanosos cada tema que Mustaine presentaba. Luego, le sucedieron “The Threat Is Real” y “Dystopia”, sencillos extraídos de su último álbum Dystopia, para que nadie diga que Megadeth vive de glorias añejas. Asimismo, y antes de presentar “Skin o’ My Teeth”, el oriundo de La Mesa, California, se dio el tiempo para realizar una dinámica con el público, indicando alternadamente a cada una de las plateas y la cancha para que así vocearan cada uno más fuerte su emoción.
Asimismo, se presentó de manera arrolladora y a modo de interludio, la reconocible línea de bajo de Dawn Patrol, que sonó robusta y voluminosa, seguida de “Poison Was the Cure”, “Trust” y “Take No Prisoners”, cuya interpretación se vio reforzada por un impresionante set de luminaria. Tras ello, el single “Sweating Bullets” y “A Tout Le Monde”, apoyado por las palmas del público, que confirmó entusiasta las palabras de Mustaine: “Yo sé que conocen esta canción”. Luego de esto, vino “Mechanix”, hasta llegar, quizás, a uno de los más reconocidos himnos tanto de Megadeth como del trash y del metal en general: «Symphony of Destruction». El público coreó una y otra vez “Megadeth, Megadeth, aguante Megadeth” a todo pulmón y durante la interpretación íntegra del tema. Tras esto, vino “Peace Sells”, canción que dejaba intuir el fin de la presentación de Mustaine y compañía. Durante la performance de dicho tema, se tomó el escenario el insigne Vic Rattlehead, mascota nuclear de Megadeth que vino a reforzar todo el imaginario pos apocalíptico y cyber punk de la agrupación oriunda de California, hasta llegar al cierre con “Holy Wars…The Punishment Due”, cuya interpretación trajo consigo una encendida audiencia por aquí y otra luminosa bengala por acá, que dejó con más de un dolor de cabeza a los encargados de seguridad.
De este modo, se vivió la clausura de una jornada maratónica, cargada de riffs, imaginarios crípticos y apocalípticos y baterías aceleradas. La presentación de Megadeth vino a cerrar impecablemente una fecha que será recordada por el público chileno metalero, pues Mustaine y compañía, a pesar de no contar con un registro vocal sólido, señalaron rotundamente cómo debe sobrellevar los años una banda tan insigne como Megadeth: tocando en vivo, haciendo rodar cabezas. Por lo mismo, siempre será un agrado recibir a Mustaine como huésped por estas lares, pues como el mismo lo indicó por ahí “Hay muchas cosas que son obviamente geniales en Chile: la comida, el vino, la costa. Pero para mí, lo mejor es la gente y su amor por el heavy metal[…] Por allá, el metal pareciera ser la música del hombre común”. Porque si el metal es la música del hombre común en Chile, entonces Megadeth, tras su paso por Santiago este 2017, fue la sinfonía que posibilitó la comunidad.
Setlist:
Hangar 18
Wake Up Dead
In My Darkest Hour
The Threat Is Real
Skin o’ My Teeth
Dawn Patrol
Poison Was the Cure
Trust
Take No Prisoners
Sweating Bullets
A Tout Le Monde
Dystopia
Mechanix
Symphony of Destruction
Peace Sells
Encore:
Holy Wars… The Punishment Due
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