Por Jorge Fernández.

Los años 80 se estaban partiendo por la mitad cuando en el país trasandino surgía una de las bandas ícono del hard rock y el heavy metal en español. Walter Giardino en la guitarra y Guillermo Sánchez en el bajo parecían llevar la batuta y el timón al unísono desde siempre y para siempre. Lamentablemente de esos dos emblemas sólo queda el primero, debido al reciente deceso de Sánchez hace unos meses atrás.

1988 fue el año en que salió su disco homónimo, el primero de una nutrida carrera que se ha visto salpicada de innumerables integrantes, lo que no ha logrado opacar la maravillosa esencia que los caracteriza hasta el día de hoy. De este disco destacan canciones como “Preludio Obsesivo” y la siempre atractiva “El sueño de la Gitana”.

A pesar de este novel reconocimiento fue el disco Magos, Espadas y Rosas (1990) el que los distinguiría como una de las bandas de rock más importantes de Latinoamérica. En esta placa consagratoria están incluidas las dos canciones de mayor lucidez creativa e interpretativa, cantadas y conocidas por miles de adeptos e, incluso por no tan fanáticos. Y es que “Mujer Amante” y “La Leyenda del Hada y el Mago” posicionó a la agrupación en lugares disímiles del estrellato, porque para algunos amantes del rock pesado, la fama de sus artistas no es un logro y Rata Blanca llenaba recintos inalcanzables para bandas afines. Sin embargo, nada de esto fue impedimento para seguir teniendo fanáticos heterogéneos.

De ahí en más su sello se multiplicó en canciones de una enorme solidez vocal y musical en general, donde la plusvalía del actual vocalista, Adrián Barilari, lo catapultó también como un referente de la banda. Así dentro de su vasta trayectoria nos vamos encontrando con grandes temas, tales como “Guerrero del Arco Iris” de su disco homónimo de 1991, “Aún Estás en Mis Sueños” y “El Reino Olvidado” sólo por nombras algunas.

La música y la sinfonía de Rata Blanca se basan en lo épico, en la historia legendaria de mundos paralelos perfectamente reconocibles en las ideas del imaginario mental. Hablar de brujas, de magos y de territorios lejanos idílicos y placenteros, se vuelve un factor común que, poco a poco, se va desglosando conforme transcurre la historia. Porque lo que se trae a la realidad son sueños para muchos olvidados, en que la imaginación no tiene tope a la hora de llevar a cabo una buena descripción.

Es Rata Blanca que vuelve a Chile para ser parte del tremendo concierto “Santiago Gets Louder 2017: El Domo”. Son esos argentinos que se han apoderado de la admiración hispanohablante, los mismos que están de regreso, sin importar los desequilibrios naturales que han tenido, sino que imponiéndose a ellos con todo lo que con su entrega se es capaz de hacer: un buen rock pesado de la mejor factura.