Por María Paz Carrasco.

Conversamos con la artista Ela Rondó, quien ha emergido exitosamente en la escena emergente chilena gracias a su último sencillo, producido por el músico Martín Berríos y Matías Reyes, “Furia de crecer”, ahondando en el impacto que ha tenido desde entonces, además de brindar sus nuevos aprendizajes y miradas a futuro.

Bienvenida Ela y felicitaciones por tu sencillo, ¿cómo te sientes con el recibimiento?, ¿estaban dentro de tus expectativas las más de 20.000 reproducciones en Spotify?

El lanzamiento ha ido súper bien, he notado un antes y después como artista. Me siento enormemente agradecida del recibimiento que ha tenido “Furia de crecer” porque, por ejemplo, la gente sigue escuchando la canción a diario o guardandola en su lista a dos meses de su estreno; cosa que no había pasado con otros singles. También fue inesperado que mucha gente me ha escrito sobre cómo les ha llegado, y me siento muy feliz en ese sentido porque si alguien capta bien la esencia de la canción, que no es fácil, o le remueve algo de mi trabajo, puedo ser feliz. Y todo esto me ha motivado mucho a seguir creando, aprendiendo y lanzando, incluso en pandemia. Sobre Spotify, la verdad es que siempre que lanzo nuevo material intento no tener expectativas para así sorprenderme con lo que vaya pasando. Si bien estoy súper feliz de haber llegado a los 20K en poco tiempo, veo los números como indicadores, no como éxito o fracaso. Si las reproducciones van subiendo un poquito con cada single, algo estás haciendo bien.

¿Apropias parte del éxito al trabajo en conjunto en producción con Martín Berríos?, ¿qué tal la experiencia?

Producir “Furia de crecer” con Martín Berríos fue una experiencia maravillosa en su totalidad, estoy muy feliz con la producción y el nivel de fidelidad de la esencia de la canción. Trabajar con él y Matías Reyes hizo que todo lo bueno que tenía la composición se amplifique, plasmando un toque único gracias a la fusión de ideas provenientes del estilo único de cada uno. Siempre es beneficioso para la creatividad trabajar en equipo, y si trabajas en grupo con músicos bacanes como Martín y Mati, te sacaste la lotería. Y no solamente por el feedback que se produce, sino también porque se aprende mucho; lo más importante para mí siempre será hacer una canción de la mejor forma posible, aunque eso signifique cambiar, estrujar o dar vuelta todo. Y trabajar en grupo ayuda mucho a eso.

¿Cuáles serían tus referentes e influencias actualmente?

Mis referencias últimamente han sido Crumb, The marías, Billie Eilish, Kids See Ghosts, Lana del Rey, por nombrar algunos.

¿“Furia de crecer” se encuentra en una arista nueva por mostrar?

“Furia de crecer” es la puerta de entrada a una nueva estética, tanto sonora como visual, con una Ela más fiel a sí misma. Considero también que tiene un sonido más auténtico, y con eso me refiero al equilibrio de armonía, letra y producción propia. Espero que cuando la gente la escuche pueda reconocer mi voz, sonidos y estilo.

¿En qué momento te sientes ahora como música?

De alguna forma me siento ansiosa y emocionada por lo que se viene. Y no solamente por la música de mi proyecto, sino que también por los cambios que habrá en la industria musical post pandemia. Creo que para cuando vuelvan los shows en vivo todo será aún más emocionante, el público estará lleno de ganas de consumir música y shows en vivo, por lo que creo que se implementarán más recursos como video mapping, festivales temáticos y más experiencias sensoriales dentro de los mismos shows. En mi caso, me encantaría poder jugar en el escenario con elementos como sonidos 8D, medios inclinados hacia lo psicodélico y visuales, todo para tener una experiencia más “completa” dentro de la música.

Y dentro del contexto de la pandemia mundial, ¿cómo ha sido trabajar y/o componer en encierro?, ¿hay algún aspecto que te gustaría pulir?

Si bien trabajar en pandemia no se me ha hecho tan complicado, ya que tengo material ya grabado, ha estado lento la composición. Pienso que si estás encerrado y ves lo mismo todos los días es difícil tener nuevas inspiraciones. El factor emocional también influye mucho, la ansiedad se ha elevado con la pandemia, al igual que los miedos y la sensación de incertidumbre. Y dentro de los aspectos positivos está que he tenido más tiempo e interés en el lado de la producción musical, creo que es lo mejor que puede hacer un artista del siglo XXI: aprender a producirse.

Entonces, desde tu perspectiva, ¿cuáles son las ventajas de auto-producirse en un futuro?

Una de las ventajas es que puedes entrar a crear no solo en armonía y letra, sino que también en los timbres, efectos y mezcla de una canción. Actualmente hay muchísimas canciones que tienen armonías simples, pero lo que puede diferenciarlas del resto son efectos sonoros, que convierten la composición en una pieza única de estilo propio. He leído harto que “toda la música ya está escrita” porque, claro, si bien las combinaciones y progresiones musicales sí son muchísimas, no son ilimitadas. Sin embargo, los sonidos y timbres si lo son y ahí es donde se pone interesante aprender a producirse.

También un gran plus actual es el constante apoyo dentro de la escena.

Sí, siento que comparto espacio con muchos artistas bacanes, aunque quiero aclarar que yo estoy recién partiendo y muchos de estos artistas tienen muchísimas más experiencia que yo. Entre ellos están, por ejemplo, el proyecto de José Destro, Mr. Gruv, Jo Aedo, Malú Mora, y muchos otros artistas secos.

¿Por qué crees que la gente debería conocer a Ela Rondó?

La gente debería darle una oportunidad al proyecto Ela porque si al escucharla les gusta su música, también les gustará el arte que hay detrás. Es importante que las personas escuchan música nueva chilena, porque en un tiempo más se irá formando toda una nueva generación de artistas con nuevos e interesantes estilos.

Y para finalizar ¿se vienen cosas más cerca o lejos de ahora?

Pronto anunciaré nuevas fechas, que serán lanzamientos de nuevos singles.