6 de marzo 2025.

Por Sebastián Allende.
Fotografías por Javier Martínez.

Dicen que la música es el arte que te despierta emociones, recuerdos, sentimientos y que tiene el poder de acompañarte, sin estar presente en forma tangible, pero que de alguna forma te custodia, te abraza y siempre está contigo. Así es como existen artistas y bandas que logran quebrar eso que en el cine llaman la cuarta pared, llegando a ser más que un acompañamiento sonoro y, en cierta forma, se transforman en parte de uno mismo.

Este jueves 6 de marzo fue el turno de escuchar, en Sala Metrónomo, los sonidos de un grupo de los que ya son parte de los nuestros, los trasandinos de Eterna Inocencia, quienes con esta fecha comenzaron una minigira por nuestro país que los llevará, además de Santiago, el próximo viernes 7 de marzo a Trotamundos en Quilpué, repitiendo el 8 de marzo en la Metrónomo y cerrando este tour nacional el domingo 9 de marzo en la Bodeguita de Nicanor, en Concepción.

Una tocata en día laboral siempre tendrá la complejidad de la espera de los comensales y es por aquello y se agradeció la espera por parte de los músicos y la organización, quienes cedieron retrasar el comienzo en pactados 30 minutos, para que nadie se perdiera el show. En ese tiempo, más de uno se entretuvo con alguna conversa, revisó el merch oficial, se hidrató o, incluso, trató de buscar el mejor lugar posible para disfrutar de la descarga sonora que se nos vendría.

Fue en una entrevista con nosotros, que Guille Mármol, vocalista y líder de Eterna, nos indicó que el show de este jueves sería distinto al del sábado y en cierta forma un poco más especial. El comienzo de este concierto nos daría la razón con la interpretación de una canción que de seguro muchos nunca habían escuchado, “Sufferland”, parte de su segundo disco Días Tristes, de 1997, en donde la agrupación aun exploraba parte de los sonidos más puros del hardcore de la vieja escuela con letras en inglés. Un regalo para los fans de la vieja escuela que desde un comienzo vacilaron con todo y la rompieron en el mosh.

null

“A los que se han apagado” seguiría con las revoluciones a mil en un Metrónomo que ya se encontraba copado y no daba respiro, a pesar de haber tocado recién tan solo dos canciones. “Es una gracia de la vida, poder interactuar por medio de la música con la gente de Santiago”, nos comenta Guille para volver al ruedo con “Encuentro mi descanso aquí”, la primera que cae de Las Palabras y Los Ríos, sin lugar a dudas, el disco más celebre de los trasandinos y que los tuvo girando dsde Iquique a Punta Arenas durante el 2024.

null

“Trizas a Vos” y “La Resistencia” seguirían cimentando el escenario para la caída de bombas sonoras que retumbarían en las almas y en los corazones de los cientos presentes. Puede que las canciones sean sonidos y letras para algunos sin sentido, pero esta noche era una velada para que muchos, como uno, transformaran esas canciones en armas para fortalezas gracias a temas como “Cassiopeia” en donde toda la fanaticada cantó hasta no dar más: “Sé fuerte, valiente, transforma tus tristezas en canciones”, tras la descarga seguiríamos con “Sin quererlo” y “A Elsa y Juan”, mazazos sonoros y líricos que a más de alguno le sacó un par de lágrimas.

null

“Cuando pasan las madrugadas”, uno de los himnos de la noche, dió pie para dos piezas de lo más novel de la discográfica de Eterna Inocencia: “Let’s Start the Sunrise Together” y “Superalikal”, temazos de la vieja ultranza y veta hardcore del debut de Eterna. «Punkypatin», fue acompañado con intensas demostraciones de pogo e, incluso, intentos de varios fanáticos de pasar la valla y subir al escenario para presentar los respetos a la banda en escena.

null

“Puente de piedra” continuaría con las pulsaciones a mil que caerían de pleno para que Guille se arrime una guitarra al pecho y comience a acompañar al bajo de Alejandro Navajas en las primeras notas de “Le pertenezco a sus ojos”, la semi balada en clave punk rock que llevó a los presentes a desnudar sus corazones, a cantar en pos de sus amores presentes y ausentes. “Me Llevarás” y “Mi Puño es la Herramienta” cerrarían la revisión de Entre Llanos y Antigales, otro de los discos fundamentales de esta agrupación. “Cartago” sonó muy fuerte con un Alejandro Navajas dando el alma en el escenario en la segunda voz.

“Forgotten Cause”, “SK8 for Life”, “Skateboarding These Days” y “My Family” sellaron el retorno, para sorpresa de muchos, del reencuentro de Eterna Inocencia con sus primeras canciones y esa etapa más jovial y hardcore que enamoró e hizo descubrir la banda a muchos en la mitad de los años noventa. Con “Río Luján”, “La Risa de los Necios”, “Abrazo” y “Weichafe Catrileo”, Eterna comenzaría a despedir la primera serie de shows en nuestro país con un set generoso y hecho para los fans, quienes verían caer la noche junto al himno “Nuestras Fronteras” cantado hasta más no poder y quedar sin voz para dar cierre a una velada que no vino más que a confirmar la unión, la comunión y la cofradía entre una banda que cada vez que quiere y puede cruza Los Andes para ofrendarnos parte de su arte, sus canciones y recibir de vuelta mucho amor.

Setlist:
Sufferland
A los que se han apagado
Encuentro mi descanso aquí
Trizas de vos
La resistencia
Cassiopeia
Sin quererlo
A Elsa y Juan
Cuando pasan las madrugadas
Let’s Start the Sunrise Together
Superalikal
Puente de piedra
Le pertenezco a sus ojos
Me llevarás
Mi puño es la herramienta
Cartago
Forgotten Cause
SK8 for Life
Skateboarding These Days
Río Luján
La risa de los necios
Abrazo
My Family
Weichafe Catrileo
Nuestras fronteras

>>> REVISA NUESTRA RESEÑA FOTOGRÁFICA PINCHANDO EN ESTE TEXTO <<<

.