27 de Abril 2023.

Por Rocío Belen.
Fotografías por Francisco Aguilar A.

En una acalorada e intensa noche de grandes conciertos en la ciudad capitalina, podemos destacar uno de los mayores hitos del año si de motivación popular hablamos. Con una cancha sold out prácticamente desde el primer día, y un Caupolicán hirviendo hasta las pestañas, se presentaron los autralianos Parkway Drive junto a los icónicos norteamericanos Lamb of God, quienes detonaron una de las noches más explosivas de este 2023.

Comienza el show de Parkway Drive poco antes de lo pactado con una banda que de manera salvaje y acaparadora, dispara el primer mosh de la noche de forma inmediata con «Glitch». Le sigue con gran desplante Prey, donde se destacan los grooves baterísticos de Ben Gordon como una grata sorpresa a nivel sonoro. La puesta en escena de los transoceánicos continúa con la clásica «Carrion» en los sólidos guturales de Winston McCall, quien en un arriesgado look blanco se apoderó del escenario desde el primer minuto. Entre imparables saltos sonó «The void», seguida de inmediato por «Soul Bleach», moviendo a la masa en un intenso circle pit que arrasó con la general. Con «Vice Grip» se alzan los puños y el público corea otra de las favoritas de la noche. Le sigue al hilo «Dedicated» junto a Karma en un espectáculo lumínico que no dejaba de mantener a la audiencia totalmente cautivada, es realmente notorio cuando una banda trae un equipo de trabajo capacitado y preparado a tope. Tras la petición del frontman se arma un circle pit que acompaña a «Bottom Feeder» destapando la olla a presión que venía cocinándose desde el minuto cero en que subieron al escenario. Junto con una ambientación híbrida que juega entre el claro-oscuro frío y cálido suena la última sección del show con «Crushed» iniciando con una intro tántrica excitante y destrozando el venue a punta de growls y un vaivén de cuerdas en las guitarras principales de Jeff Ling y las rítmicas de Luke Kilpatrick, para cerrar con el poderoso retumbe del clásico «Wild Eyes» destacando las agresivas frecuencias bajas de Jia O’Connor quien a pesar de mantenerse estático la gran parte del show, tuvo una ejecución notable.

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Sin duda alguna Parkway Drive fue una grata sorpresa para quienes no habían escuchado nunca a la agrupación, pero más aún fue la sorpresa de los fans quienes comentaban constantemente que la experiencia en vivo es una de las más notables en lo que va la cartelera del año, destacando con creces la calidad sonora y la ejecución que a ratos llegaba a ser incluso mejor que en estudio.

Continuando con las sorpresas de timing, los norteamericanos Lamb of God también salen antes del tiempo pactado para sorprender sin piedad a la distraída audiencia de manera repentina para comenzar tirando toda la carne a la parrilla. Entre trotes comienza «Memento Mori» con todo y más, sonando contiguamente «Ruin» entre saltos al unísono de las percusiones de Chris Adler. Con un doble pedal a full le sigue «Walk me in hell» destacando el tremendo poder vocal de Randy Blythe quien además se mostró muy cercano y carismático a lo largo de todo el espectáculo. Con «Resurrection Man» y «Ditch» las cosas se pusieron intensas, agotando cada espacio a punta de un agresivo mosh que no dio tregua alguna. Con «Now you got something to die» y «Contractor for» se destaca el juego de luces y los saltos aunque a ratos se percibían ciertos pequeños desajustes sonoros que poco parecían importar, siendo quizá Mark Morton y Willy Adler los más afectados en cuanto a la claridad de sus guitarras. En «Contractor» sube la temperatura en un ya copadísimo Teatro Caupolicán que incansablemente no dejaba de disfrutar cada paso que daba Lamb of God sobre escena. Con el clasiquísimo «Omerta» las voces del público se unieron para hacer un solo canto al cielo cuales corderos de Dios rezando a los ángeles caídos. El set continúa sólido junto a «Set to fail», «Omens» y «11th hour» donde John Campbell destaca íntegramente, pasando por por discos como Wrath y el homónimo también. Con «512» vuelve la intensidad dejando afónicos a los asistentes, quienes a pesar de la falta de aire no dejaron pasar el éxtasis que trajo «Vigil», seguida de «Laid to Rest», cerrando apoteósicamente con el poder desgarrador de la icónica «Redneck», cerrando con bombos y platillos una presentación enérgica, sodómica y altamente estruendosa.

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Si hablamos de Lamb of God no queda más que decir que fueron un plato fuerte muy esperado que no decepcionó en ningún momento, abarcando lo mejor de su discografía y plasmando en el escenario capitalino una de las mejores presentaciones que hemos visto en lo que va del año. Ha sido una racha importante de conciertos que hace que cada vez la vara esté más alta en cuanto a performances, sonido, iluminación y recursos visuales, entrando en una maldicha competencia entre cual será el mejor espectáculo del 2023, siendo este quizá un potencial prospecto para el top 5 de la temporada.

Setlist Parkway Drive:
Glitch
Prey
Carrion
The Void
Vice Grip
Dedicated
Karma
Bottom Feeder
Crushed
Wild Eyes

Setlist Lamb Of God:
Memento Mori
Ruin
Walk With Me in Hell
Resurrection Man
Ditch
Now You’ve Got Something to Die For
Contractor
Omerta
Set to Fail
Omens
11th Hour
512
Vigil
Laid to Rest
Redneck

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