11 de marzo 2023.
Por Paulo Domic.
Fotografías por DG Medios y Jaime Valenzuela.
Esto lo esperamos por mucho tiempo. Demasiado para una banda de la talla de The Black Crowes, que a lo largo de los años se ha erigido como una de las bandas más importantes del rock en los 90 y que dejó una marca indeleble en la industria de la música y en sus fans con su estilo blues rock. Una banda que logró mantener su autenticidad en un mundo de la música cada vez más comercializado y que anoche tuvo su primera gran comunión con el público chileno en el Teatro Caupolicán, en una inolvidable velada que tuvo a los nacionales de The Versions como representantes del rock chileno.
Ya son casi tres décadas desde que The Black Crowes debutó en Chile. Y en rigor, hasta ayer aún no tocaban aquí con propiedad, ya que esa primera vez fueron el número de apertura del concierto de Jimmy Page y Robert Plant en el Sausalito de Viña del Mar, cuando los próceres británicos aterrizaron tocando lo mejor de Led Zeppelin. Probablemente ya ni lo recuerden, pero en esa oportunidad hubo una larga interrupción de su presentación, ya que se quemó un generador eléctrico y quedaron totalmente en silencio ante los 20 mil espectadores que disfrutaban de su música. Un incómodo momento que incluso significó que se acortara bastante su repertorio para no retrasar el inicio del show principal.
Encabezados por los hermanos Chris y Rich Robinson, el grupo fundado en Atlanta, Georgia, ha debido soportar las peleas y reconciliaciones de los consanguíneos antes de llegar a este regreso a Sudamérica luego de tanto tiempo. Dejaron su huella en la década de los 90, con un audaz e inspirado rock sureño más tradicional que fue recibido con los brazos abiertos pese a haber aparecido en la era del grunge. Su disco debut y mayor éxito, Shake Your Money Maker, llegó para seducir a una generación que amaba el rock de los 70 y que no consiguió enganchar con la evolución que el género tuvo hacia el glam rock o incluso el heavy metal. 20 años después de Woodstock, los jóvenes de esa época y entonces profesionales en plena edad productiva, recibieron muy bien este regreso a las raíces y prefirieron su música, captando también la atención de sus hijos que crecieron escuchando el rock clásico. Más de 5 millones de copias vendidas le dieron a ese disco un carácter legendario que le significaron a la banda un éxito que luego jamás pudieron equiparar.
La tibieza en la recepción de sus posteriores trabajos, comenzó a abrir las diferencias y heridas entre los hermanos. Las peleas los mantuvieron separados primero entre 2002 y 2005, luego entre 2015 y 2019. Pero ya dicen por ahí, «la sangre tira». Ad portas de los 30 años del lanzamiento de su obra prima y cumbre, decidieron limar las asperezas con dólares y anunciaron el regreso con 46 fechas sólo durante 2020 para tocar íntegramente el disco Shake Your Money Maker.
El grupo The Versions fue el invitado a inaugurar la noche. Un cuarteto integrado por destacados músicos nacionales que forman parte de proyectos connotados. Álvaro Gómez de Perrosky (batería y coros), Samuel Maquieira de Yajaira (guitarra y voz), Luciano Mariño de Los Chinches (guitarra y coros) y Alejandro Gómez de Solar (bajo y coros), dan vida a este grupo de rock con influencias setenteras que el 2022 regresaron con el sencillo “Wake Up”.
Durante su presentación de media hora, el cuarteto santiaguino mostró lo mejor de su repertorio basado en sus tres discos de estudio y las dos canciones nuevas editadas a fines del año pasado. Pusieron toda su pasión sobre el escenario para hipnotizar al público con el narcótico ritmo e insistentes compases de su rock indie inspirado también en el rock clásico y psicodélico. Un buen número de apertura para una noche que prometía muchas guitarras.
Muy puntualmente a las 21:00, y al ritmo de la clásica “Are You Ready” de Grand Funk Railroad salen desde detrás del telón los cuervos, desencadenando la algarabía de los fanáticos que por décadas esperaron este momento. Porque claramente a través de estos 27 años de ausencia, muchas generaciones de nuevos seguidores han cultivado la pasión por ellos y esta era la tan anhelada oportunidad de hacer un sueño realidad. Por lo mismo, la bienvenida fue ensordecedora y la apertura con “Twice as Hard” fue cantada de principio a fin por todo el teatro, ayudando también al hecho de que la voz de Chris Robinson estuvo algo baja en esa primera canción para luego arreglarse definitivamente y poder disfrutar de su enorme talento.
Respetando perfectamente el orden del disco, luego vinieron las tremendas “Jealous Again” y “Sister Luck”, que mostraron la impresionante clase de la banda que tuvimos sobre el escenario. Un combo de 8 músicos en escena, que incluía la maravillosa participación de dos voces femeninas que apoyaban con sus bellas voces a la también inmaculada interpretación de Chris. Álgido fue el instante en que interpretaron la emocionante “Seeing Things”, un blues con arreglos vocales en que prácticamente la banda completa canta, dándole un toque de góspel a una canción intensa donde Robinson canta con el alma entera. Y luego un clásico: “Hard To Handle”, un cover de Otis Redding que es tal vez el más grande de sus éxitos y que puso a todo el Caupolicán a saltar al ritmo de la música.
El show es realmente de altísima factura musical. El sonido fue perfecto, cada instrumento se escuchaba claro y preciso, y la banda hizo gala de una elegancia inigualable para honrar el espíritu del rock que interpretan. Todo esto potenciado por la impresionante calidad vocal que mantiene Robinson, además de su calidez y simpatía sobre el escenario. La experiencia de cada miembro de la banda quedó demostrada fehacientemente en un show de lujo que pasea por distintos estados de ánimo. Que emociona y divierte. Que se mete en el corazón. La espera tan larga valió la pena, ya que pudimos ver a una banda muy compenetrada, que dio tal cantidad de conciertos el año pasado que prácticamente ya está en piloto automático, pero jamás demostrando hastío alguno por estar sobre las tablas. Se nota que lo disfrutan y por eso la gente se conecta con ellos. Los vitorearon constantemente y obsequiaron copiosos aplausos.
Terminaron de tocar su más célebre disco completo y luego continuaron agasajando a sus incondicionales con más éxitos como “Wiser Time”, y “Thorn in My Pride”. El telón se bajó con “Remedy” y el cover de “Rocks Off” de The Rolling Stones una noche muy especial de primer encuentro con la mayoría de quienes anoche acudieron a verlos al coliseo de San Diego. Un legendario grupo musical en plena vigencia, aún al tope de sus capacidades y que tiene muchísimo para seguir entregando y enseñando también a través de las verdaderas clases de rock que dan en cada una de sus presentaciones. Una lástima que por tanto tiempo hayan estado lejos de estas latitudes. Es de esperar que más temprano que tarde puedan regresar, ya que dieron testimonio de que cuentan una base importante de seguidores y que rock and roll, tienen de sobra y para rato.
Setlist:
Twice as Hard
Jealous Again
Sister Luck
Could I’ve Been So Blind
Seeing Things
Hard to Handle
Thick n’ Thin
She Talks to Angels
Struttin’ Blues
Stare It Cold
No Speak No Slave
By Your Side
Wiser Time
Thorn in My Pride
Remedy
Rocks Off