BBS Paranoicos en Mibar: Escríbelo en tu piel
4 de noviembre 2017.
Por Francisca Neira.
Fotografías por Agustín León.
A las 22.23 horas exactas de ayer sábado 4 de noviembre salieron al pequeño escenario de Mibar los cuatro músicos que componen la emblemática banda punk chilena BBS Paranoicos. Tras un breve saludo, parten raudos con “Taquicardia” y el público, que ocupa un 80% del espacio, la corea a todo pulmón.
Tal como en esas tocatas punk de antaño, los temas suenan de corrido, sin interrupciones, subiendo la adrenalina de todos los presentes y para cuando tocan la tercera canción, “Sangre en las manos”, el local ya está a su máxima capacidad, las voces que corean están cada vez más roncas y desgarradas y el ambiente de efervescencia se instala por completo en el segundo piso del bar de Santa Isabel.
Como es tradición, Omar Acosta, vocalista de la banda, sede el micrófono a Carlos Kretschmer, bajista histórico de BBS Paranoicos y ex integrante de la mítica banda KK Urbana, para que interprete el track “Collage”, y de ahí en adelante se alternarán ambos en las voces principales y los coros.
El concierto ya lleva una hora y han sonado temas de los discos más recientes (del año 2000 en adelante) de la banda que ya tiene 26 años de carrera, “Collage”, “Algo no anda”, “Capital”, “Antídoto” y “Cruces”. Pese a que el rango de edad de los asistentes es mayor al de otras presentaciones de BBS Paranoicos, todos cantan y saltan disfrutando al máximo cada uno de los temas que suenan.
En el momento más álgido del concierto, el cuarteto toca una canción nueva (aún sin nombre) que formará parte de su próximo disco. Y entonces recuerdo que este es el último recital de la banda hasta fin de año, ya que durante noviembre grabarán su nuevo trabajo en Estados Unidos, contando con la participación de Bill Stevenson, baterista de la histórica banda de punk californiano Descendents, con quienes compartieron escenario cuando nos visitaron en diciembre del año pasado.
Continúa el concierto. Las máquinas de aire acondicionado de Mibar marcan 16º en las pantallas, pero el calor adentro es casi insoportable. Eso no es motivo para que cuando suena “Tan lejos”, canción perteneciente al primer disco de estudio de BBS Paranoicos, Incierto final (1991), todos salten y se aprieten cerca de la tarima que cumple la función de escenario. Lo mismo cuando tocan la ya convertida en himno, “Mentira”.
Hasta acá el setlist que la banda tenía programado para esta jornada que se dio, como siempre, en un ambiente muy familiar, intercambiando comentarios y chistes entre los músicos y el público presente. No obstante, ese no fue el final del concierto y, cumpliendo con la promesa de un show de larga duración (casi 90 minutos), el cuarteto santiaguino respondió a algunas peticiones del público y tocaron algunos temas que acordaron “sobre la marcha”. Así sonaron, entre otras, “Cristales” y la súper coreada “Calla y Espera”.
Mención honrosa merece en esta reseña un integrante del público que Omar invita al escenario para mostrar los tatuajes alusivos a la banda que lleva escritos en la piel, convirtiéndose de alguna forma en el representante físico de una sensación instalada en todos los presentes en éste y en todos los conciertos de BBS Paranoicos: fidelidad y devoción.
Setlist:
Taquicardia
Siempre es tarde
Sangre en las manos
Capital
Sin salida
Collage
Velocidad
No volví
Lo peor
Cuando pare de llover
Vives/Mueres
Siempre el miedo
Infierno
Algo no anda
Recuerdos
Canción nueva (sin nombre)
Para nunca
Nueva 1
De una vez
Tan lejos
Ruidos
Tata Wise
La rabia
Irreparable
Mentira
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–“Tan lejos”, canción perteneciente al primer disco de estudio de BBS Paranoicos, Incierto final (1991),
«Tan lejos», canción perteneciente al segundo disco de BBS Paranoicos, «Fábricas Mágicas… Lápidas Tétricas» (1995).