Black Sabbath en Chile: El fin de lo negro, aunque brille como siempre
Estadio Nacional, 19 de noviembre 2016.

Por Francisco Aguilar A.
Fotografía por Carlos Muller.

Ayer tuvimos la suerte de poder asistir al show parte de la gira “The End Tour”, anunciada como la despedida oficial de la banda británica Black Sabbath, la cual presenta a sus miembros originales Ozzy Osbourne (vocalista), Tony Iommi (guitarrista) y Geezer Butler (bajista), acompañados por el baterista Tommy Clufetos. El tour, que partió en enero de este año en Estados Unidos y terminará el próximo en su natal Inglaterra, recorrerá tres continentes mostrando un arsenal de éxitos, de casi medio siglo de carrera, en la cual la agrupación ha tenido más de una veintena de integrantes. Sabbath, una de las bandas pioneras del heavy metal, mostró un show maduro, energético y con una conexión constante con su fanaticada.

En la previa a la salida de los británicos, se presentó la agrupación chilena Yajaira y los norteamericanos de Rival Sons. Estos últimos iniciaron su show a las 20 horas exactas y con su hard rock, lograron crear un ambiente idóneo para que el público que ya colmaba el Estadio Nacional pudiese comenzar a rockear. Con temas como su hit “Open my eyes”, la banda liderada por Jay Buchanan logró su cometido, no dejando de agradecer a los anfitriones del día, la posibilidad de poder acompañarlos en este magno evento. Su presentación acabó a eso de las 20:35 hrs, dando pie a la preparación del escenario para el plato fuerte de la noche, tiempo en el que el recinto capitalino termino de llenar cada espacio que aún tenia disponible.

Siendo las 21:10 hrs y con el respetable ya bastante inquieto por la pequeña demora, se apaga la música envasada, las luces y en las pantallas se puede visualizar un demonio merodeando, momento en el cual la banda liderada por Ozzy entra a escena, provocando la algarabía de un Estadio Nacional en su máxima capacidad. Iniciaron los fuegos “Black Sabbath” y “Fairies Wear Boots”, temas en el cual Osbourne se saca su larga chaqueta negra, anima constantemente con las palmas al público y da sus primeras palabras. Es interesante ver la humildad y complicidad que genera Ozzy con la gente, se ve siempre cercano, alentando siempre a aplaudir, a saltar, a gritar. El británico de 67 años, mantiene una energía admirable para su edad, para el estilo de vida que ha llevado, y si bien a la lejanía al desplazarse si se denota su edad, al verlo actuar con su carisma y energía logran contagiar hasta al veinteañero más escéptico.

El show continuo con “After Forever” e “Into the Void”, temas en los cuales la comunión de la banda con los asistentes se mantuvo incólume. Ozzy siempre alentando con las palmas, dando las gracias en cada final de canción y presentando la que se aproximaba. Hubo varios punto altos en el show de Sabbath, uno de ellos el de la interpretación de “Snowblind” y “Warpigs”, donde aparecen las primeras bengalas en cancha, todo el Nacional saltando enfervorizado, Ozzy se agacha y hace reverencias agradeciendo el cariño, presenta a la banda, acompañando cada nombre con un “Mister…” y se puede ver como un millar de celulares iluminan el recinto.

El público asistente era multi generacional, encontrando niños de no más de 10 años, hasta abuelitos. Familias enteras, en la cual los padres han heredado sus gustos musicales a sus hijos, todos con una vestimenta común, una polera negra con el símbolo de la agrupación británica. Osbourne siempre alentando a la gente, dándoles espacio para que griten, motivándolos con enérgicos “hey”. Vino el turno de “N.I.B” donde se pudo ver en pantalla imágenes de shows antiguos de la agrupación, con un Ozzy vestido de blanco, donde quizá muchos de los asistentes recordaron etapas de su juventud, en la cual la música era la única forma de manifestar su no conformidad con lo que se vivía en la época. Posteriormente sonaron “Hand of Doom” y “Rat Salad”, con un solo eterno de Tommy Clufetos, el que hizo relucir toda su maestría interpretativa, con una batería de doble caja, ambas con el símbolo representativo de la agrupación, provoco en reiteradas oportunidades, una ovación cerrada.

Otro punto alto de la jornada, fue la interpretación de “Ironman”, donde los celulares volvieron a iluminar el estadio. En las pantallas se podía ver ráfagas de fuego acompañando a las imágenes de los músicos en escena. Para ir cerrando la parte formal del show, los británicos interpretaron “Dirty Women” y “Children of the Grave”, donde Ozzy comienza a despedirse, vuelven las bengalas a escena en distintos lugares del recinto, en la pantalla se ve un camino formado solo por calaveras y el frontman vuelve a hacer reverencias al publico, agradeciendo todo el cariño entregado.

Al hacer la salida “falsa” es Ozzy mismo el que grita el típico “Uohh, ohhh, ohh…” para que la gente pida “one more song”, la gente de inmediato se alinea con el artista y con un ensordecedor cántico, la banda vuelve a escena para interpretar “Paranoid“. El show ha terminado, son las 22:50 hrs y los británicos dándose cuenta que la misión ha sido cumplida, se paran abrazados en el medio del escenario para recibir la ultima ovación, el fin ha llegado.

Para cerrar, cuando la gente se retiraba, en las pantallas se puede ver “The End”, lo que acompañado por el tema “Zeitgeist” sonando como música envasada, dan cierre a uno de los eventos que marcarán pauta a este 2016 y será recordado por años por cada uno de los que tuvimos la oportunidad de estar ahí.

Setlist Rival Sons
Electric Man
Secret
Pressure and Time
Hollow Bones Pt. 1
Torture
Open My Eyes
Keep On Swinging

Setlist Black Sabbath
Black Sabbath
Fairies Wear Boots
After Forever
Into the Void
Snowblind
War Pigs
Behind the Wall of Sleep
N.I.B.
Hand of Doom
Rat Salad
Iron Man
Dirty Women
Children of the Grave

Encore:
Paranoid
Zeitgeist (Grabación de cierre)